A) el Invierno demográfico
mundial
La expresión "Invierno demográfico" designa el proceso de envejecimiento
que una población se encuentra padeciendo cuando la tasa de natalidad
es menor a 2.1, en otras palabras, cuando por cada persona fallecida
nacen menos de 2 personas. Con el transcurso del tiempo, este proceso
desemboca en el incremento paulatino de la parte adulta y longeva
y el decrecimiento paulatino de la parte joven e infantil de una población.
China, Europa y América Latina ya han comenzado a vivir en este invierno
demográfico. Tan grave es el proceso, que los medios de comunicación
social ya no pueden ignorar el problema que ha planteado la aplicación
sistemática a escala mundial del control del crecimiento poblacional
por parte de los ricos y poderosos del mundo.
Hace poco más de un año, el matutino Clarín informaba que una de las
mayores preocupaciones que afrontan las autoridades que gobiernan
China es el "próximo envejecimiento de la población": ya el 10% de
su población está constituido por ancianos, y se estima que para el
año 2030 un 26,5% de la población tendrá más de 65 años. A largo plazo,
aumentará en dicho país el número de trabajadores jubilados y bajará
abruptamente la cantidad de trabajadores activos. Para compensar tal
desfasaje, se calcula que los impuestos para esa época tendrían que
aumentar un 60%, lo cual sería desastroso para la economía1.
En otras palabras, se verifica en China lo que ha acontecido en otros
lados y en otras épocas: el descenso poblacional ocasiona graves trastornos
económicos y sociales. Por su parte, en esa misma época, el matutino
La Nación daba a conocer que hacia el año 2030 el envejecimiento poblacional
europeo obligará al Viejo Continente a "importar" 20 millones de inmigrantes
para ocupar puestos de trabajo, ya que no contará con trabajadores
autóctonos. De no llevar a cabo esta oleada inmigratoria, el PBI en
Europa disminuirá un 20%, según estima la Organización Mundial del
Trabajo. En este sentido, el panorama demográfico europeo no es para
nada alentador, ya que en su horizonte se perfila un panorama de "tasas
de natalidad cada vez más bajas y envejecimiento de la población"2.
Unos días antes, el 24 de diciembre de 2004, el ex secretario general
de las Naciones Unidas, Boutros-Ghali, daba los siguientes datos,
que corroboraban el diagnóstico informado por esta periodista: hacia
el año 2050 la población europea disminuirá un 17%, por eso el Viejo
Continente deberá recibir 1.600.000 inmigrantes por año para mantener
su tasa anual de crecimiento3.
En Bulgaria se prevé que en el año 2020 tendrá un millón de habitantes
menos que en el año 2001 y 4.500.000 menos en el 2050. En Italia,
el porcentaje de personas con 65 años o más es de 173,7% respecto
a las personas menores de 15 años. En Rusia, la población ha disminuido
un 7% en los últimos 15 años, y se pronostica que la cantidad de habitantes
descenderá en 20 millones de personas en las próximas dos décadas
(actualmente, tiene 143 millones de habitantes)4.
Alemania es el país que afronta la situación más dramática, ya que
es uno de los 20 países en el mundo con menor tasa de fertilidad,
según el Instituto para la Evolución de la Población: 8,5 nacimientos
por cada mil habitantes. Es el mismo nivel del año 1945, al finalizar
la segunda guerra mundial. A este ritmo, la población alemana desaparecerá
en 300 años. Según los expertos, la causa de esta merma poblacional
se debe "al sistema social y al elevado uso de la píldora anticonceptiva
entre mediados de la década de 1960 y comienzos del decenio de 1970"5.
Nuestra Patria hispanoamericana no escapa a esta tendencia demográfica.
Un reciente estudio de la Comisión Económica para América Latina y
el Caribe (CEPAL) informa que "disminuye el crecimiento demográfico
y la población envejece", con el agravante -en comparación con las
zonas más desarrolladas del planeta- que "la cobertura social es más
precaria". Si bien la población mundial aumenta anualmente a razón
de 78 millones de personas, y más del 95% de ellas nacen en los países
en desarrollo, preocupa el hecho que crecimiento demográfico descendió
en América latina y el Caribe: de 2.7 por año a mediados del siglo
XX, se ha pasado en la actualidad a una tasa de 1.5. El retroceso
más evidente y relevante en la región lo constituye "la caída en la
tasa de fecundidad". El dato más llamativo es que en el transcurso
de los últimos 40 años los índices reproductivos (en su momento entre
los más elevados del planeta) han disminuido a niveles por debajo
de la tasa media global, con el agravante que la transición demográfica
a escala mundial "se está dando en forma más acelerada [en los países
en desarrollo] que en los países ricos". Por supuesto, América latina
está dentro de esa transición demográfica más acelerada6.
La lectura atenta de estos últimos datos expuestos por la CEPAL nos
permite destacar algo sumamente importante: el retroceso demográfico
que se está viviendo en la región coincide temporalmente [a partir
de la década del ´60] con el inicio del combate contra el crecimiento
poblacional mundial, llevado a cabo por los sucesivos gobiernos de
los Estados Unidos en nombre y en beneficio de los grupos y sectores
más ricos del planeta.
Como hemos hecho conocer en anteriores oportunidades, la política
antinatalista mundial ha sido uno de los objetivos estratégicos cardinales
(si no el fundamental) de esta plutocracia privada, para la consolidación
de la apropiación incesante e ilimitada de las riquezas y recursos
naturales mundiales y las producidas a escala planetaria por el desarrollo
económico, tecnológico y social. América Latina ha constituido uno
de los "campos de batalla" de este combate en contra de los pueblos
y naciones del mundo, en especial contra su población pobre. En este
sentido, al igual que en Europa y en Asia, el poder privado mundial
viene cumpliendo en nuestras naciones con sus objetivos antinatalistas,
ya que nos ha hecho entrar en este proceso de transición demográfica
y de envejecimiento poblacional, a través de los famosos planes de
salud reproductiva y de derechos reproductivos, que consta de dos
grandes capítulos o temáticas: 1) las técnicas de anticoncepción y
sus respectivos instrumentos antinatalistas (esterilización voluntaria,
métodos artificiales de control de la natalidad y despenalización
del aborto); y 2) los cambios culturales y políticos que consoliden
el aspecto instrumental, como ser postular en forma dogmática el falso7
derecho básico de "decidir la cantidad de hijos que se quiere tener
y el espaciamiento entre ellos", que conlleva la posibilidad de "evitar
el nacimiento de un hijo que no se desea"; o también enfatizar en
la educación de los jóvenes las ventajas de formar familias pequeñas,
a lo sumo con dos hijos y no más que esos, porque eso permitiría mejorar
la calidad de vida individual y familiar; o promover la realización
del potencial más elevado del individuo, sin ninguna connotación social
o comunitaria8.
En particular, resulta paradójico que la CEPAL advierta sobre el problema
del envejecimiento poblacional en América Latina, cuando 7 años atrás,
en un encuentro de Secretarios de Población de los países latinoamericanos,
recomendaba la aplicación en nuestros países y naciones del control
del crecimiento demográfico: para este famoso organismo internacional,
existe en la región "[...] la necesidad de respetar y promover los
derechos reproductivos, incluyendo la posibilidad de regular la fecundidad;
[...]", por cuanto "la alta fecundidad se transforma en un elemento
que contribuye a la transmisión intergeneracional de la pobreza",
ya que "la alta fecundidad de los pobres, tanto a raíz de los costos
directos y de oportunidad que entraña la maternidad y la crianza como
al efecto reductor del ingreso per capita -a escala de los hogares-
que conlleva un elevado índice de dependencia, constituye un freno
para la acumulación del capital -en cualquiera de sus modalidades-
requerida para garantizar un proceso de movilidad social ascendente"9.
Como se puede apreciar, en ese entonces, para la CEPAL la causa de
la pobreza en América latina la constituyen los hijos, no la injusticia
social. En su nuevo informe, la CEPAL deja de lado el cinismo y la
mentira alevosa, pero sólo para informar la verdad a medias: enuncia
el problema, pero sin ocuparse de las causas, con lo cual presenta
un informe políticamente inicuo.
Por supuesto, los grandes medios de comunicación informan la noticia,
pero ni indagan ni dan indicios que permitan acceder al conocimiento
de las causas que han llevado a esta situación, es decir, lo presentan
como un problema sin más, como algo que se ha producido por azar.
Pero el problema es tan grave y la verdad es tan evidente que ya no
se puede ocultar: el mundo en su conjunto marcha hacia el envejecimiento
poblacional. Nos queda a nosotros tratar de determinar la o las causas
que han provocado este invierno demográfico mundial, que no es otra
que la aplicación del plan estratégico de controlar el crecimiento
poblacional mundial, objetivo fundamental de la plutocracia mundial,
con el clan Rockefeller a la cabeza y con personajes como Henry Kissinger
como sus empleados y gerentes administradores, que luego de tomar
por asalto el aparato estatal norteamericano han utilizado y usufructazo
sus recursos para llevar a cabo su política de exterminio masivo,
como nuevo holocausto planetario, de los pueblos y naciones pobres
del mundo. En esencia, la familia Rockefeller constituye la cara visible
y el brazo ejecutor de este poder mundial privado que por un lado
va acaparando egoístamente los bienes y las riquezas del mundo, a
través de grandes organizaciones supranacionales privadas (Grupo Bilderberg,
Comisión Trilateral, el americano Council on Foreign Relations [CFR],
el británico Instituto Real de Estudios Internacionales [RIIA], etc.)
y por otro lado va ejecutando, sin prisa pero sin pausa, el holocausto
demográfico que le permita gozar de sus incalculables riquezas, sin
nadie que los perturbe o moleste. Uno de los miembros emblemáticos
del clan mencionado ha sido John Davison Rockefeller III, quien desde
1952, mediante la creación del Population Council (Consejo de Población)
se ocupó en particular de llevar adelante investigaciones y acciones
que hicieran posible controlar y disminuir el crecimiento poblacional
en el mundo.
B) el Holocausto demográfico diseñado por los Rockefeller
1. En 1966 dio comienzo la aplicación sistemática del control del
crecimiento poblacional mundial, control elaborado, diseñado y ejecutado
a nivel planetario. En ese año, John Davison Rockefeller III redactó
la ya mencionada Declaración sobre Población por parte de líderes
mundiales, en la que postuló los dogmas fundamentales del proyecto
antinatalista, para luego hacerla firmar a 30 dirigentes políticos
mundiales10. Éste es un
documento importantísimo por varios motivos. En primer lugar, porque
pone en evidencia que el problema que preocupaba en la década del
´60 al poder plutocrático corporativo privado en todo el mundo no
era ni el comunismo ni la subversión marxista (extrañamente financiada,
apoyada y armada por el poder financiero británico y el norteamericano),
sino "el crecimiento poblacional mundial que amenaza a la paz mundial".
En segundo lugar, este documento muestra que, gracias a la gestión
del magnate norteamericano, el miedo demográfico de la plutocracia
fue convertido en problema de Estado a nivel mundial. Una vez más,
la oligarquía mundial recurrió en ese entonces, como lo ha hecho antes
y lo hace ahora, a la consuetudinaria práctica de trasladar al aparato
estatal sus problemas y sus temores.
2. En 1969, el entonces presidente norteamericano Richard Nixon convocó
a ambas cámaras del Congreso americano, para anunciar que el crecimiento
poblacional, estadounidense y mundial, constituía el principal problema
que el gobierno y la sociedad estadounidenses debían enfrentar, oficializando
el crecimiento demográfico como problema de Estado de la administración
gubernamental norteamericana. Es por eso que en 1970 anunció la conformación
de una Comisión, para que elaborara un Informe sobre el crecimiento
población y el futuro americano, en cuya presidencia ubicó al "inventor"
del problema demográfico, al ya mencionado Rockefeller. En 1972, la
Comisión presidida por este personaje presentó el mencionado Informe,
un texto de 184 páginas, en el que se encuentra diseñada la estrategia
integral recomendada para afrontar el crecimiento demográfico, en
particular el de Estados Unidos, aunque con ciertas referencias al
mundo en general. Este documento no es muy conocido, tampoco ha sido
traducido al español, pero es importantísimo conocerlo, ya que se
encuentra detallado en él las técnicas y los instrumentos recomendados
para ejecutar una política antinatalista exitosa: métodos y productos
artificiales, mutilación física-fisiológica (vaseoctomía y ligadura
de trompas) y despenalización del aborto. Pero además se encuentran
detallados los cambios culturales y políticos fundamentales para consolidar
el efecto de las técnicas y de los instrumentos: en la educación,
en los medios de comunicación y en el campo de la salud, pública y
privada. Sobre todo, se encuentra explicitado en este documento el
objetivo al que aspiraba y aspira la oligarquía angloamericana y mundial:
crecimiento poblacional 0 (cero) para el año 2000: "a largo plazo
debe reestablecerse, e inevitablemente lo será, un promedio de crecimiento
[poblacional] cero"11.
3. En 1974, por pedido del presidente Richard Nixon, el Consejero
de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, "don" Henry Kissinger,
elaboró su famoso Informe, el Memorando Secreto 200/74, en el que
desarrolla a escala planetaria la estrategia antinatalista elaborada
por Rockefeller para Estados Unidos. Una vez desclasificado, en 1989,
este documento puso en evidencia que el crecimiento poblacional mundial
es un problema, sólo y únicamente porque amenaza la seguridad nacional
de los Estados Unidos y sus intereses de ultramar. Significa entonces
que trabajar a favor del control del crecimiento poblacional y los
anti-valores que lo fundamentan (embarazo no deseado, decidir la cantidad
de hijos, etc.) supone trabajar a favor de la seguridad nacional de
los Estados Unidos, mejor dicho, del poder plutocrático que administra
el aparato estatal norteamericano en provecho propio; trabajar a favor
del control del crecimiento poblacional supone defender los intereses
geopolíticos estratégicos de los Estados Unidos, aunque se disfrace
de política democrática, socialista o de centro izquierda.
En este sentido, este famoso Memorando promueve claramente el imperialismo
demográfico y el sacrificio de las jóvenes generaciones con un criterio
meramente economicista, en cuanto a) se propone "ofrecer planes alternativos
de acción para los Estados Unidos en su manejo de asuntos poblacionales
en el extranjero, particularmente en países en vías de desarrollo"12.
A tal fin, considera que "es urgente iniciar la toma de medidas que
reduzcan la fertilidad en las décadas de 1970 y 1980"; b) esta reducción
de la fertilidad "tendrá ventajas en el corto plazo en los países
en desarrollo, al disminuir la demanda de alimentación, salud, educación
y otros servicios", lo cual permitirá "incrementar la capacidad para
contribuir a inversiones productivas"13.
Evidentemente, la jauría plutocrática mundial considera que el rápido
crecimiento poblacional en los países en vías de desarrollo y los
altos porcentajes de gente joven "son dañinas para la estabilidad
interna y las relaciones internas de países en cuyo progreso los Estados
Unidos está interesado", lo cual "crea problemas políticos e incluso
de seguridad nacional para los Estados Unidos"14.
¿Cuál es el objetivo de este imperialismo demográfico? Kissinger plantea
claramente que el propósito es alcanzar un crecimiento poblacional
mundial de 6 mil millones de habitantes para la mitad del siglo XXI
y un máximo de 8 mil millones de habitantes hacia finales del siglo
XXI, lo cual implica que la tasa de fecundidad en el año 2000, a nivel
planetario, debería ser de 1,1 (un nacimiento por cada fallecimiento),
lo cual lleva inevitablemente al envejecimiento poblacional. Es por
eso que aquí surge la pregunta crucial: ¿por qué los líderes mundiales
se sorprendan y preocupan por el envejecimiento poblacional, si han
cumplido a rajatabla con estas directivas de Rockefeller y Kissinger?
Evidentemene, el "plan" de Rockefeller y Kissinger se ha cumplido
a la perfección, por eso hoy estamos atravesando a escala planetaria
el invierno demográfico que tanto preocupa. ¿Cómo fue posible que
este proceso se llevara a cabo? Una de las tácticas que permitió que
este proyecto antinatalista pudiera aplicarse con éxito, fue la recomendación
de Kissinger de hacer ejecutar este plan en los países en vías de
desarrollo "desde adentro", es decir, mediante personas e instituciones
autóctonas o nativas, que expresaran los objetivos, valores e ideales
de la plutocracia como si fueran signo y símbolo de progreso y beneficio
para la población, para encubrir y disimular el carácter imperialista
y colonialista de la propuesta15.
Otra de las tácticas progresistas que recomendaba Kissinger, que le
ha permitido ocultar el origen siniestro del argumento y del proyecto,
era "hacer énfasis en el derecho de los individuos y parejas a determinar
libre y responsablemente el número y espaciamiento de sus hijos [...]".
En otras palabras: el objetivo era y es cumplir el dogma de Rockefeller,
pero traducido y camuflado de tal manera que pareciera un signo de
evolución y progreso social16.
En este sentido, en sus diversas expresiones políticas y sociales
(socialismo, radicalismo, peronismo renovador y transversal, etc.,
organizaciones no-gubernamentales financiadas desde Estados Unidos
y el Reino Unido, etc.) el progresismo "democrático" en nuestra Patria
ha sido y era hasta ahora la quinta columna de esta ofensiva antinatalista
del plan Kissinger y del ideario rockefelleriano, aunque pretenda
estar situado ideológicamente en las antípodas17.
Últimamente, la pretendida centro-derecha (con epicentro en la provincia
de Neuquén) también ha comenzado a reivindicar esta ofensiva antinatalista,
insertándolo en la Constitución de la provincia como "valor" democrático,
pero en realidad al servicio del colonialismo plutocrático.
C) la Complicidad criminal de nuestra dirigencia política et alii:
de la impotencia social al activismo sexual-genital
El 24 de marzo de 1976 comenzó el proceso a través del cual nuestro
país fue paulatinamente sometido política, social y económicamente
a las garras del poder privado mundial plutocrático que hemos mencionado.
No se puede ni olvidar ni ignorar el apoyo explícito que la familia
Rockefeller dio al verdadero conductor del Proceso de Reorganización
Nacional, José Alfredo Martínez de Hoz, quien fue el artífice del
vaciamiento industrial de la Argentina y el que le impuso a nuestra
Patria y a nuestro Pueblo la nefasta deuda externa (y eterna), que
todavía hoy nos agobia18.
Tampoco se puede olvidar el apoyo político expreso que el sr. Henry
Kissinger le brindó a la Junta militar gobernante, la que en realidad
actuó como guardia pretoriana de los sectores especulativos, financieros
y parasitarios, nacionales e internacionales, que representaba el
entonces ministro de Economía y en cuyo nombre actuaba19.
La guerra por la recuperación de las Islas Malvinas en 1982 provocó
la ruptura de la alianza entre el poder plutocrático mundial y las
Fuerzas Armadas. A partir de allí comenzó la demolición paulatina
y sistemática de éstas últimas, después de haber combatido contra
la guerrilla subversiva, supuestamente marxista pero financieramente
sostenida con dólares estadounidenses y libras esterlinas británicas20.
Lo que se preservó en forma prácticamente intacta hasta el día de
hoy es el poder civil que financió, usufructuó y aprovechó la represión
del aparato militar del mencionado Proceso. Es decir, más allá de
los cambios cosméticos de superficie, el "retorno a la democracia"
a partir de 1983 significó tanto la continuidad de la política económica
neocolonialista del Proceso cívico-militar de 1976, como también,
en forma por demás llamativa, el comienzo de un verdadero cambio socio-cultural,
pero el diseñado y elaborado al detalle por los Rockefeller en las
décadas 60 y 70, y universalizada por Henry Kissinger en su famoso
Memorando antes mencionado. Nuestra Patria comenzó a sufrir los embates
de la política antinatalista impulsada por los personajes mencionados,
pero "en democracia". En forma cuasi esquizofrénica, nuestro progresismo
vernáculo repudió el Proceso de Reorganización Nacional, únicamente
en su aspecto militar local, pero no dudó en alzar las banderas geopolíticas
y culturales del poder privado mundial que financió e impulsó el mencionado
proceso de avasallamiento, entrega y postración de nuestra Patria.
Hasta el día de hoy, se repudia a las Juntas militares gobernantes
a partir de 1976, pero por otro lado se promueven hasta el hartazgo
los cambios políticos y culturales imaginados por los Rockefeller,
verdaderos dueños y patrones del proceso cívico-militar de 1976.
1. El colonialismo legislativo. En el año 2001, "nuestro" Congreso
Nacional sancionó la famosa Ley de Salud sexual y Procreación responsable.
Una lectura atenta de la misma permite ver que, en este caso, nuestra
legislación sobre salud reproductiva legitima la ideología y los argumentos
antinatalistas del clan Rockefeller, es decir, nuestra legislación
"sexual" no es argentina, sino una ley plutocrática internacionalista,
ya que sirve para colonizarnos demográficamente, ya que es totalmente
contraria a nuestro interés nacional y a las necesidades de nuestro
pueblo. Por ejemplo, uno de los objetivos que se plantea en el art.
2 de la citada normativa es de "garantizar a toda la población el
acceso a la información, orientación, métodos y prestaciones de servicios
referidos a la salud sexual y procreación responsable". Esto repite
lo recomendado por John Davison Rockefeller III en su ya mencionado
Informe de 197221: "que
la educación sexual esté a disposición de todos, y que sea presentada
en forma responable a través de organizaciones comunitarias, los medios
de comunicación y especialmente las escuelas" (Cap. 9). En la ley
de 2001, el mismo art. 2 afirma que otro de los objetivos es "prevenir
embarazos no deseados", con lo cual legitima el pedido de Rockefeller,
en el capítulo 11 del Informe: "posibilitar que los individuos eviten
los partos no deseados", que "a todos los americanos, independientemente
de la edad, status marital o ingreso, se le debe permitir evitar los
nacimientos no queridos [...], sobre la base del principio ético que
sólo los hijos queridos deben ser traídos al mundo". Otro objetivo
de "nuestra" ley es "promover la salud sexual de los adolescentes",
lo cual reitera otra recomendación de Rockefeller: "en torno a la
meta de reducir los embarazos y los partos no deseados entre los jóvenes,
[se] recomienda que la información y los servicios de control de nacimientos
estén disponibles para los adolescentes, en instalaciones apropiadas
que sean sensibles a sus necesidades y preocupaciones" (Cap. 11).
Por si fuera poco, Rockefeller recomienda "que los Estados adopten
legislaciones positivas que permita a los menores recibir información
y servicios anticonceptivos y profilácticos en ámbitos apropiados,
sensibles a sus preocupaciones y necesidades" (idem), lo cual se asegura
con esta ley "progresista". Además, el art. 5 de la ley habla de las
acciones coordinadas entre los Ministerios de Salud, Educación y Acción
Social para "capacitar educadores, trabajadores sociales y otros operadores
comunitarios", a fin de formar agentes aptos para "mejorar la satisfacción
de la demanda por parte de los efectores y agentes de salud", "contribuir
a la capacitación, perfeccionamiento y actualización de conocimientos
básicos, vinculados a la salud sexual y a la procreación responsable
en la comunidad educativa" y "promover en la comunidad espacios de
reflexión". Con un poco de maquillaje estilístico, este artículo reitera
lo recomendado por Rockefeller: "la creación de programas para 1)
capacitar a doctores, enfermeras y paraprofesionales, incluyendo personal
indígena, para la provisión de todos los servicios de salud relacionados
con la fertilidad; 2) desarrollar nuevos criterios para la utilización
del personal profesional y paraprofesional; y 3) evaluar métodos mejorados
para organizar el reparto y la entrega de estos servicios" (Cap. 11).
También recomienda "el desarrollo y la implementación de un programa
financiado adecuadamente, para desarrollar métodos apropiados de planificación
familiar, para ejecitar cursos para maestros y administradores escolares,
y para ayudar a los Estados y a las comunidades locales a integrar
información sobre planificación familar en cursos escolares, tales
como Higiene y Educación Sexual" (idem)22.
En otras palabras: EL AUTOR INTELECTUAL DE LA ACTUAL LEY NACIONAL
DE SALUD REPRODUCTIVA Y PROCREACIÓN RESPONSABLE ES JOHN DAVISON ROCKEFELLER
III, como así también de las que rigen a nivel provincial. Nuestros
legisladores sólo han puesto la firma, el contenido y los contenidos
le pertenecen al "Gran Hermano" de nuestros legisladores. En realidad,
el auténtico legislador en esta materia, como en algunas otras, es
la dinastía Rockefeller. Llegados a este punto, es inevitable preguntarse
por qué los diputados y senadores socialistas, en vez de luchar contra
la explotación capitalista y de seguir a sus diversos guías y predicadores
de la revolución, cumplen con el ideario criminal de Rockefeller &
co., traicionando los postulados del marxismo y del socialismo; o
por qué los diputados y senadores peronistas cumplen con el ideario
criminal de los Rockefeller, dejando de lado lo que el mismo General
Perón postulara como camino político contrario al proyecto de Rockefeller
y Kissinger; por qué cambian a Perón por las banderas de Rockefeller
y se siguen llamando peronistas.
2. El colonialismo pedagógico. El otro gran ámbito estratégico para
la plutocracia representada por los Rockefeller (y bien servida por
nuestros cipayos) es el educativo, indispensable para imponer los
disvalores culturales que hagan posible imponer la anticoncepción
y el aborto, no sólo como política de Estado sino como estilo de vida.
Para no extendernos en demasía, nos remitimos en este caso al intento
por imponer infructuosamente a nivel parlamentario (Cámara de Diputados)
la Ley de Educación Sexual Integral, intento impulsado en especial
por legisladores peronistas, socialistas, aristas y radicales. Al
justificar la defensa del proyecto, la diputada socialista María Elena
Barbagelata afirmaba que quienes se niegan a abordar este tema en
el ámbito educativo "niegan el derecho de los educandos y educadores
a acceder al conocimiento de un tema fundamental para ejercer los
derechos sexuales y reproductivos que comprenden el derecho a decidir
cuándo tener hijos y cuántos hijos tener, desde una mirada positiva
y responsable de la sexualidad"23.
La diputada se confiesa socialista, pero repite literalmente el argumento
con el que John Davison Rockefeller III funda su plan de control del
crecimiento poblacional mundial, en la Declaración sobre población
del año 1966 ya citada. Además, el intento de impulsar una ley de
este tipo ha sido recomendado ya en 1972 por el "Gran Hermano" del
norte: "La Comisión recomienda la promulgación de una Ley de Educación
poblacional, para ayudar a los sistemas escolares a establecer programas
de educación poblacional bien planificados, de tal modo que las generaciones
presentes y futuras estarán mejor preparadas para afrontar los desafíos
que surgen del cambio poblacional" (Cap. 11). Como se puede apreciar
con toda claridad, el ideal y el proyecto es de los Rockefeller, pero
quienes lo lo impulsan son nuestros socialistas vernáculos, nuestros
peronistas intimidados y marchitos, y nuestros intelectuales ignorantes
que han sucumbido espiritual y políticamente ante el poder del dinero
extranjero, enemigo no sólo de la Patria sino de la raza humana. Ni
que hablar del alma mater de esta ofensiva antinatalista, el "Doctor"
carnicero con título universitario y permanente apólogo del crimen,
sin que ninguna autoridad judicial se atreva a actuar de oficio, quien
en sus tiempos mozos, después de jugar a la revolución armada en pos
de la patria socialista, supo correr raudamente a los brazos del Proceso
de Reorganización Nacional, para colaborar con la intervención militar
en el Sindicato de la Unión Obrera de la Construcción, a las órdenes
de un Mayor y de un Coronel del Ejército. Al igual que muchos de sus
colegas "revolucionarios", el Ministro de marras pasó de apoyar la
lucha armada, que dio pie al golpe militar de 1976, a colaborar con
los que la reprimieron y luego a servir hasta el día de hoy a quienes
promovieron, bendijeron y usufructuaron el Proceso militar iniciado
en 1976. Como muchos otros, este ejemplar de cipayismo ha pasado de
la soberbia armada al servilismo plutocrático, siempre en contra del
pueblo y al servicio de la antipatria.
En conclusión: es obvio que estamos experimentando el famoso invierno
demográfico, el que ha sido programado, proyectado y llevado a cabo
por el gran capital internacionalista depredador, con el clan Rockefeller
a la cabeza. Los ricos del mundo no sólo se han ido apoderando y acaparando
paulatinamente de la riqueza mundial producida, también están avanzando
en el apoderamiento y dominio de los recursos naturales y de los alimentos,
tan indispensables para su subsistencia. Para gozar a pleno de esta
rapiña, desde 1972 hasta ahora se han ocupado de promover el crecimiento
poblacional 0 (cero) a nivel mundial, lo cual ha desembocado inexorablemente
en el envejecimiento que tanto preocupa. Dentro de su ofensiva imperialista
demográfica también han avanzando en la ejecución sistemática de un
verdadero holocausto demográfico mundial (en el año 1999, según datos
oficiales de las Naciones Unidas, se han ejecutado más de 15 millones
de abortos "legales" en el mundo, el 80% concentrado en cuatro países:
China, Federación Rusa, Estados Unidos y Vietnam)24.
Si a los líderes mundiales ya les preocupa el envejecimiento poblacional,
¿por qué nuestros dirigentes políticos promueven esta política plutocrática
y oligárquica? Si ya los líderes políticos de China, Italia, Francia
y Alemania están denunciando este retroceso demográfico, ¿POR QUÉ
NUESTROS DIRIGENTES POLÍTICOS, EN SU GRAN MAYORÍA, ESTÁN AL SERVICIO
DE LOS ROCKEFELLER Y SUS SECUACES? En nuestro país, este colonialismo
demográfico, tan caro a los intereses de la llamada "centroizquierda",
ahora es reivindicado e impulsado por la pretendida "centroderecha",
lo cual revela que la supuestas diferencias ideológicas de ambos arcos
del sistema político no existen, sólo son diferencias y pugnas por
el control de "la caja nacional", el resto es sometimiento servil
al capitalismo depredador internacionalista y genuflexión cómplice
ante las multinacionales de la muerte. Todos los hombres de bien,
argentinos y extranjeros que tenemos el privilegio de habitar en esta
tierra bendita y en esta Patria tan hermosa, nos enfrentamos a esta
disyuntiva formidable: resistir creativa y racionalmente a favor de
la vida, armados con la verdad, o resignarnos cobardemente ante la
prepotencia de las bestias poderosas de este mundo, traicionando a
nuestro Pueblo y a nuestra historia.
José Arturo Quarracino
1 Clarín, artículo de Hinde Pomeraniec, 7 de enero
de 2005.
2 La Nación, artículo de Elisabetta Piqué, corresponsal
del diario en Italia, 13 de enero de 2005.
3 La Nación, 24 de diciembre de 2004.
4 Agencia Zenit, 26 de febrero de 2006, Código ZSI06022503.
Según el periódico The Guardian, Rusia perderá más de 400 mil millones
de dólares en los próximos 20 años si no logra abordar el tema del
descenso poblacional, según un informe de un lobista, Delovaya Rosilla.
Éste es el motivo que ha llevado al presidente Vladimir Putin a anunciar
un plan para duplicar la población en 10 años, mediante una serie
de medidas económicas y sociales (Clarín, 15 de mayo de 2006, nota
de Gustavo Sierra).
5 La Nación, 15 y 16 de marzo de 2006.
6 Sebastián Campanario, en Clarín, "Suplemento Económico",
29 de enero de 2006.
7 Postulado dogmático, por cuanto no es otra cosa
que una "creencia" que no se explica ni se justifica, sino que simplemente
se impone como indiscutible (cf. John Davison Rockefeller III, Statement
on Population from World Leaders, 1966), porque simplemente la formula
impositivamente un miembro de la dinastía Rockefeller, la que no es
otra cosa que la cara visible y el brazo ejecutor de las estrategias
del poder privado mundial. Pero además de dogmático, este postulado
es falsamente básico, por cuanto ignora el derecho básico supremo
que es el derecho a la vida de todo ser humano, nascituro o nato.
8 The Rockefeller Commission Report, Population and
the American Future, 1972, Capítulos 1, 9 y 11. Este Informe fue elaborado
por una Comisión creada en 1969-70 por el entonces presidente estadounidense
Richard Nixon, y presidida por el mencionado John Davison Rockefeller
III, y fue concluido y entregado al primer mandatario americano en
1972. Si bien es casi desconocido, este documento es importantísimo,
por cuanto constituye una exposición detallada e integral de la estrategia
para llevar a cabo el control del crecimiento poblacional norteamericano,
y ha sido la fuente en la que se inspiró Henry Kissinger para elaborar
su famoso Informe del año 1974 (Memorando 200/74 de Seguridad Nacional,
"Implicancias del crecimiento poblacional mundial para la seguridad
de los Estados Unidos y sus intereses de ultramar"), que en esencia
es la estrategia elaborada por Rockefeller, pero proyectada a escala
planetaria, y rubricada por el presidente Gerald Ford el 26 de noviembre
de 1975 como Decisión de Seguridad Nacional 314/75.
9 CEPAL, Población, salud reproductiva y pobreza,
Aruba, 1998, pp 2 y 14 [los destacados son nuestros].
10 Entre los firmantes se encuentran Lyndon Johnson
(presidente de Estados Unidos), Harold Wilson (premier británico),
Indira Gandhi (India), Gamal Abdel Nasser (Egipto), el Sha de Persia
Mohammed Reza Palevi, Carlos Lleras Restrepo (Colombia), Eisako Sato
(premier japonés), Hassan II (rey de Marruecos), Ferdinando Marcos
(presidente de Filipinas) y... un famoso marxista, de estrechos lazos
con la realeza británica y con sospechosas vinculaciones con la CIA
americana: Josef Broz (Tito), presidente de Yugoeslavia.
11 The Rockefeller Commission Report, Population
and the American Future, 1972, Capítulo 2.
12 Informe Kissinger, "Presentación".
13 Op. cit., "Resumen Ejecutivo", Tendencias demográficas
mundiales. Es decir, menos hijos en el mundo para poder hacer mejores
negocios. Más aún, "si se logra progresar significativamente en reducir
el crecimiento de la población, el impacto positivo en el crecimiento
del PBI y los ingresos per capita serán significativos".
14 Op. cit., "Resumen Ejecutivo", Recomendaciones
de Política.
15 Op. cit., Ibidem: "Debemos tener cuidado que nuestras
actividades no den la apariencia a los países en vías de desarrollo
de una política de país industrializado orientada contra los países
en vías de desarrollo. Se debe tener la precaución de que cualquier
método en esta área que apoyemos sean métodos que podamos apoyar desde
adentro de los países en vías de desarrollo. Los líderes del Tercer
Mundo deben estar a la cabeza y llevarse el crédito que les corresponda
por programas exitosos".
16 Ibidem. No hay que olvidar que esta propuesta
de Kissinger revestía el carácter de un secreto de Estado. Recién
en 1989 todo esto salió a la luz, una vez que el proceso antinatalista
ya estaba en marcha.
17 Este sometimiento y subordinación política y cultural
del progresismo "democrático" es lo que explica que todas las organizaciones
no-gubernamentales que predican esta revolución sexual, aunque se
proclamen críticos de la globalización que hace posible su accionar,
reciban cuantiosos y millonarios fondos del país "imperialista" por
excelencia (a través de organismos dependientes del Departamento de
Estado nortemericano, de las grandes fundaciones exentas de impuestos
[Ford, Population Council, Human Rights Watch, etc.]), del Foreign
Office inglés o de la Embajada Británica en Buenos Aires.
18 Todavía en 1992, en un reportaje realizado por
Ana Barón y publicado en la revista Somos, David Rockefeller sostenía
que "Martínez de Hoz es un viejo amigo... el precursor de todo en
la Argentina fue Martínez de Hoz... Es un viejo amigo mío. Yo realmente
creo que él es un verdadero patriota argentino que no pudo poner en
práctica sus ideas..." [subrayado nuestro].
19 Sin este apoyo plutocrático internacional representado
por la entonces novel Comisión Trilateral, el Proceso nunca hubiese
podido entablar relaciones comerciales de primer nivel con la Unión
Soviética marxista, lo que le produjo algunos resquemores con la administración
del presidente James Carter, ni tampoco hubiera podido condecorar
a las máximas jerarquías de las Fuerzas Armadas soviéticas con la
Orden del Libertador Gral. José de san Martín. Vale la pena tener
presente que la Unión Soviética marxista era amiga de los Rockefeller,
a tal punto que los gobernantes soviéticos tenían un representante
permanente en los encuentros de los máximos dirigentes de la Comisión
Trilateral.
20 Resulta por demás llamativo que los "terribles"
y "sanguinarios" combatientes anticapitalistas hayan terminado posteriormente
refugiados en Londres, París, Roma o México, o que hayan permanecido
en el país y colaborado con las fuerzas armadas a las que supuestamente
combatían, y que hoy en día trabajen "progresivamente" financiados
por la CIA (a través de la Fundación Ford), por la Embajada Británica
en Buenos Aires y por el Foreign Office inglés.
21Cf. nota 6.
22 En la Provincia de Buenos Aires, esto último se
ha implementado a través de un engendro denominado Adolescencia y
Salud, que más que una materia apenas llega a ser un tema.
23 Clarín, 13 de noviembre de 2005, artículo-nota
de Mariana Iglesias.
24 Naciones Unidas, Departamento de Asuntos Económicos
y Sociales, División sobre Población, World Population Monitoring
2002. Reproductive Rights and Reproductive Health, Nueva York, 2004.
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